Empiezan a hacerse públicos los recortes presupuestarios perpetrados por el actual Gobierno de España que cuenta con mayoría absoluta (otros vendrán que bueno me harán).
"En estos momentos en los que se pide sacrificios a todos los ciudadanos, creo que es mi deber renunciar a mi salario como jefe del Consejo y ministro de Economía y Finanzas". No, no es Mariano Rajoy quien dice esto, sino su equivalente italiano, Mario Monti. En un esfuerzo supremo, Mariano ha decidido congelarse el sueldo y ganar sólo 6.123 euros brutos al mes. ¡Eso es voluntad de sacrificio!
Las partidas destinadas a Política Social (ya se sabe, esa gentuza que no puede valerse por sí misma, a hostias los hacía caminar yo) disminuyen un 15,7 por ciento. Nada, una minucia. Habría que reducirlas a cero. El que no pueda producir y aportar algo a la sociedad, FUSILADO.
Las becas de estudio sufren un recorte del 11 por ciento (para qué mierda quieren estudiar si luego no encuentran trabajo).
Investigación y ciencia = menos 25 por ciento (que inventen ellos).
Fíjate si estará mal la cosa que hasta el presupuesto de la Casa Real sufrirá un recorte del 2 por ciento. Hay que joderse. ¿Y ahora qué hacemos? ¿Habrá para cambiar las velas del Bribón? ¿En vez de Baqueira habrá que ir a esquiar a Navacerrada con toda la chusma? ¡Qué bien nos vendría Urdangarín en estos momentos! Es que ese chico es muy despierto. El yerno ideal, doña Gertrudis, ya se lo digo yo. ¡Qué manera de crear riqueza! Un cursito, 2 millones. ¡Y con una simple llamadita por teléfono! Un ejemplo para esta juventud de vagos, sandías y perros-flauta.
martes, 3 de abril de 2012
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