Cuando contemplo animales en un zoo me inspiran un tremendo cariño,
íntimamente ligado a un profundo sentimiento de tristeza. Aún así
comprendo que si tengo que compartir el espacio con
ellos unas rejas de por medio resultan imprescindibles. Para mi seguridad,
tranquilidad, crecimiento y desarrollo.
Y no por ello dejo de quererlos, claro.
domingo, 29 de septiembre de 2013
lunes, 23 de septiembre de 2013
viernes, 13 de septiembre de 2013
Sobre el ¿sentido? de la vida
William Shakespeare lo dejó claro de una vez y para siempre. Es increíble como el arte, el gran arte, llega mucho más lejos que la filosofía y la propia ciencia -que no es otra cosa que filosofía "puesta al día"- cuando se trata de expresar la verdad. Sabido es que el sueño de la razón produce monstruos...
Allí donde la actividad académica, metafísica o teológica consume miles de páginas dando vueltas en círculos, disimulando el vacío con fórmulas abstrusas ininteligibles, cumpliendo la burocrática, meticulosa y calculada tarea de lobotomizar a aquellos que osen atreverse a pensar por sí mismos, el arte te deja KO de un derechazo a la mandíbula.
“La vida no es más que una sombra en marcha; un mal actor que se pavonea y se agita una hora en el escenario y después no vuelve a saberse de él: es un cuento contado por un idiota, lleno de ruido y de furia, que no significa nada”.
Macbeth (Acto V, Escena V).
En tanto que de rosa y azucena... pues eso.
Allí donde la actividad académica, metafísica o teológica consume miles de páginas dando vueltas en círculos, disimulando el vacío con fórmulas abstrusas ininteligibles, cumpliendo la burocrática, meticulosa y calculada tarea de lobotomizar a aquellos que osen atreverse a pensar por sí mismos, el arte te deja KO de un derechazo a la mandíbula.
“La vida no es más que una sombra en marcha; un mal actor que se pavonea y se agita una hora en el escenario y después no vuelve a saberse de él: es un cuento contado por un idiota, lleno de ruido y de furia, que no significa nada”.
Macbeth (Acto V, Escena V).
En tanto que de rosa y azucena... pues eso.
lunes, 9 de septiembre de 2013
España ha evolucionado, cohonez!
Ya están los agoreros y aguafiestas de siempre. Prefiero ver la Botella medio llena. España ha evolucionado mucho. Y para muestra un botón. Esta tarde me voy a relajar con un buen café con leche en la Plaza de Castilla. Por la noche, cenita romántica en Legazpi.
¡Aúpa Ana Botella! ¡Esa grasia que no se pué aguantar...!
domingo, 8 de septiembre de 2013
Blanco y en Botella
Lo que más duele del resultado de la reciente elección de sede olímpica celebrada en la ciudad de Santa María del Buen Ayre es el grado de ingratitud e incomprensión que puede llegar a alcanzar el mundo, desarrollado o no, hacia aquello que es genuinamente superior. Ese "je ne sais quoi" que desprenden mentes preclaras como las de la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, cuyo nombre nos conduce inevitablemente a pensar en el genio que habita la ídem, atrapado entre cristales desde tiempo inmemorial o la de Alejandro Blanco, a la sazón presidente del COE: mente en blanco, quedarse en blanco, electroencefalograma plano, nada, vacío interestelar. Whatever.
Dos mentes, reflejo de otras preclaras mentes olímpicas que comen, viajan y disfrutan del dinero público, capaces de derretir cucharas, esclarecer los misterios de la física cuántica o resolver la conjetura fuerte de Goldbach (la débil es para mentes inferiores).
En el siglo XIX las ballenas tenían un indudable interés comercial por su grasa. Eso es mucho decir respecto a ciertos políticos.
En el fondo, el problema fundamental no es saber inglés o no. Para eso existe la traducción simultánea. El problema central es no tener nada que decir o decir tonterías en cualquier idioma.
Lo paradójico es que España cuenta con gente muy preparada que brilla en las cuatro esquinas del mundo. Gente de una o varias carreras y que habla 3 o 4 idiomas con soltura. Gente que sabe lo que significa salir adelante en circunstancias adversas.
España sólo remontará cuando los políticos más estúpidos de la historia de este país -la comparación con los que pilotaron la transición o incluso el ingreso en el entonces Mercado Común Europeo resulta insultante- desaparezcan para siempre (se volatilicen) y la generación de gente que se ha formado en el extranjero y homologan a España entre las naciones más avanzadas asuma el control de la nave.
Hasta entonces, FOBOS y DEIMOS. O ridículos internacionales como el que acaban de protagonizar nuestros "responsables olímpicos", que no son responsables, ni son olímpicos ni son ná de ná.
En lo que respecta a la intervención del Príncipe de Asturias, futuro Rey de España si un meteorito del tamaño del que acabó con los dinosaurios hace 65 millones de años no lo remedia y de su referencia a "estoy muy contento de haber participado personalmente en Barcelona 92" como argumento de venta para que nos dieran los Olimpiadas otra vez, prefiero guardar silencio.
La prudencia y el temple han de guiar el comportamiento de un caballero. En todo momento. Además, la Sangre Azul entumece mis músculos y paraliza mis sentidos.
Dos mentes, reflejo de otras preclaras mentes olímpicas que comen, viajan y disfrutan del dinero público, capaces de derretir cucharas, esclarecer los misterios de la física cuántica o resolver la conjetura fuerte de Goldbach (la débil es para mentes inferiores).
En el siglo XIX las ballenas tenían un indudable interés comercial por su grasa. Eso es mucho decir respecto a ciertos políticos.
En el fondo, el problema fundamental no es saber inglés o no. Para eso existe la traducción simultánea. El problema central es no tener nada que decir o decir tonterías en cualquier idioma.
Lo paradójico es que España cuenta con gente muy preparada que brilla en las cuatro esquinas del mundo. Gente de una o varias carreras y que habla 3 o 4 idiomas con soltura. Gente que sabe lo que significa salir adelante en circunstancias adversas.
España sólo remontará cuando los políticos más estúpidos de la historia de este país -la comparación con los que pilotaron la transición o incluso el ingreso en el entonces Mercado Común Europeo resulta insultante- desaparezcan para siempre (se volatilicen) y la generación de gente que se ha formado en el extranjero y homologan a España entre las naciones más avanzadas asuma el control de la nave.
Hasta entonces, FOBOS y DEIMOS. O ridículos internacionales como el que acaban de protagonizar nuestros "responsables olímpicos", que no son responsables, ni son olímpicos ni son ná de ná.
En lo que respecta a la intervención del Príncipe de Asturias, futuro Rey de España si un meteorito del tamaño del que acabó con los dinosaurios hace 65 millones de años no lo remedia y de su referencia a "estoy muy contento de haber participado personalmente en Barcelona 92" como argumento de venta para que nos dieran los Olimpiadas otra vez, prefiero guardar silencio.
La prudencia y el temple han de guiar el comportamiento de un caballero. En todo momento. Además, la Sangre Azul entumece mis músculos y paraliza mis sentidos.
sábado, 7 de septiembre de 2013
La casa
Tengo que cuidar la casa. Para cuando vuelvan, para cuando ellos vuelvan. Mientras tanto estaré solo con mis fantasmas. Ya ocurrió en los años treinta. No tenía dinero, no sabía una palabra de castellano. Me pusieron una bandeja para vender cigarrillos por los bares del puerto. No supe, no pude. La dejé tirada en una esquina y salí corriendo. Siempre tuve un extraño concepto de la dignidad: en mi hambre mando yo. Me presenté en una fábrica del suburbio y acepté lo que fuera. Por un sueldo miserable. Estaba orgulloso de ser un obrero. Alguien que se levanta a las 5 de la mañana y no le pide nada a nadie. Así pasé más de dos años ahorrando centavos en una lata hasta que pude pagar el pasaje de mi esposa. Toda mi vida ha sido apretar los dientes, bajar la cabeza y escuchar el rugido del telar. Hasta quedarme sordo.
Entonces ocurrió. Pude traerla a ella antes de que los nazis cerraran las fronteras. Y empezamos de cero, como dos extraños. Años de no hablar, de no sentir. De centrar la mirada en el plato. De naufragar entre azulejos.
Qué miedo le tienes a la muerte... Y sin embargo ya ves, todos han muerto. Antes de tiempo, demasiado jóvenes. Mucho antes de empezar a vivir. Algo los atrapó, algo sin nombre.
Por eso he de cuidar la casa, los cuadros, los libros, la ropa de los niños. Las fotos. El desorden. Entonces sucederá.
Un milagro.
Entonces ocurrió. Pude traerla a ella antes de que los nazis cerraran las fronteras. Y empezamos de cero, como dos extraños. Años de no hablar, de no sentir. De centrar la mirada en el plato. De naufragar entre azulejos.
Qué miedo le tienes a la muerte... Y sin embargo ya ves, todos han muerto. Antes de tiempo, demasiado jóvenes. Mucho antes de empezar a vivir. Algo los atrapó, algo sin nombre.
Por eso he de cuidar la casa, los cuadros, los libros, la ropa de los niños. Las fotos. El desorden. Entonces sucederá.
Un milagro.
viernes, 6 de septiembre de 2013
miércoles, 4 de septiembre de 2013
Suscribirse a:
Entradas (Atom)