martes, 16 de noviembre de 2010

Inodoro Pereyra


Hablando ayer de Coronel Pringles, el no lugar de mi infancia, recordé al inigualable Inodoro Pereyra, pozo de sabiduría vernácula inmortalizado por el gran Fontanarrosa.

A propósito de la mujer, filosofa Inodoro en alguna turbia y polvorienta pulpería, iluminando a todo aquel parroquiano que le prestara oídos: "uno se deslumbra con la mujer linda, se asombra con la inteligente... y se queda con la que le da pelota".

¡Cuánta razón, viejo Inodoro! Cabría agregar que, contra todo pronóstico, es ella la que decide quedarse con nosotros (de momento...). Somos menos que nada. Sombras y cenizas. Números negativos.

Para ver algunas perlas de Don Inodoro, pulsen aquí.

No hay comentarios: