Haití es un país tan pobre que su gente se lanza al mar en miserables barcas para alcanzar las costas del sur de Cuba. No hay nada más que explicar sobre el grado de desesperación que genera su pobreza endémica. ¡A Cuba, el paraíso de la sobreabundancia!
Ayer por la tarde hora local un terremoto de 7,3 grados en la escala de Richter se cebó con Puerto Príncipe. Llueve sobre mojado. Me gustaría conocer la explicación teológica de los "reajustes unilaterales del terreno" que de tanto en tanto suelen castigar a los países más pobres. Como cuando se produjo el tsunami de diciembre de 2004 afectando las costas de 12 países, en su mayor parte pobres, y acabando con la vida de más de 220.000 personas. Así, en un abrir y cerrar de ojos. En otra zona del blog -¿Dónde está Dios?- me detuve a considerar la espinosa cuestión de la teodicea: cómo conciliar la existencia de Dios y la presencia del mal en el mundo. Un tema en discusión desde hace siglos. Supuestamente, Dios deja flotar al hombre libremente y sin ataduras. Pero ¿cómo explicar el infortunio colectivo si existe un Dios todopoderoso que vela por el Supremo Bien? ¿Existen dos escalas del "Bien", una que se aplica por ejemplo a los habitantes de La Moraleja y otra a los del Tercer Mundo? ¿Quién elige las víctimas? ¿Por qué la desgracia siempre afecta a los desheredados de la tierra? Si hemos de basarnos en la realidad... He aquí la crónica de lo que está sucediendo.
El brusco movimiento de tierra se cebó con la capital, Puerto Príncipe, donde los daños materiales han sido cuantiosos y las víctimas mortales se cuentan por centenares, según relatos de testigos citados por varias agencias, aunque las autoridades temen que asciendan a miles. Sin cifras oficiales aún, el ministerio de Asuntos Exteriores español ha informado que no hay víctimas entre los cerca de 100 españoles en el país caribeño, mientras que Francia ha comunicado que hay a al menos 200 desaparecidos en un importante hotel de la ciudad.
Los equipos de rescate trabajan desde esta madrugada (hora española) a contrarreloj para sacar de entre los escombros a supervivientes. Varios edificios se han derrumbado por completo, entre ellos un hospital y una escuela. También ha sufrido daños considerables el edificio que alberga la misión de Naciones Unidas (ONU) y el palacio presidencial, aunque el embajador de Haití en México ha confirmado que el presidente está sano y salvo. Algunos funcionarios del organismo internacional permanecen en paradero desconocido, según un comunicado de la misión de la ONU.
El embajador de Haití en Estados Unidos ha asegurado a la CNN que se trata de "una catástrofe de gran magnitud". El presidente estadounidense, Barack Obama, ha declarado poco después de la medianoche (hora española) que su país "está preparado para ayudar al pueblo de Haití".
"La carretera se abrió por la mitad"
El temblor desató el pánico entre la población. "Todo el mundo temblaba, era como un baile, la gente salía de los vehículos, corría y gritaba", ha explicado un testigo a la agencia Efe, quien ha dicho que "la carretera se abrió por la mitad" ante sus ojos.
El seísmo ha dejado prácticamente incomunicada la capital, donde las líneas telefónicas que comunican con el exterior han dejado de funcionar, según el Departamento de Estado de EE UU. El aeropuerto de Puerto Príncipe también se ha visto obligado a cancelar todas sus operaciones, según ha confirmado la compañía Caribair, la principal línea aérea dominicana que vuela a Haití.
Los daños fueron numerosos en edificios de la capital haitiana, como supermercados y hoteles, según testimonios recabados en Santo Domingo por familiares y amigos de residentes en Haití. De acuerdo con estas informaciones, incluso la catedral de la ciudad se derrumbó, el palacio presidencial sufrió daños y es prácticamente imposible circular en automóvil por las calles, invadidas por los escombros.
Un hospital infantil cercano a la embajada de República Dominicana en Puerto Príncipe estaba derruido, y se escuchaban gritos entre los escombros, según el embajador dominicano en Haití, Rubén Silié. "Acabo de hablar con el diplomático y me manifestó que en el hospital de niños se escuchan personas pidiendo auxilio", aseguró el portavoz del Gobierno dominicano, Rafael Núñez. "Me dijo que el país había quedado literalmente destrozado", añadió.
Catástrofe para la ONU
La Fuerza de Paz de Naciones Unidas, liderada por Brasil, también sufrió el impacto de la tragedia y anunció que sus militares están preparados para ayudar a los damnificados, informaron fuentes militares, que aseguraron que hasta mañana no se podrá evaluar la gravedad de los daños materiales sufridos. El ministro de Defensa de Brasil, Nelson Jobim, exhortó a los militares de su país destacados en Haití que "hagan todo el esfuerzo posible" para disminuir el sufrimiento de la población local por esta "catástrofe". La Fuerza de la ONU cuenta con cerca de 6.700 militares procedentes de 17 países, de los cuales 1.266 son brasileños. Este cuerpo ya participó en el socorro a las víctimas de los huracanes que afectaron a Haití en 2004 y en 2008.
El temblor tuvo su epicentro a escasos 15 kilómetros de Puerto Príncipe. La tierra tembló por espacio de más de un minuto. Además, se activó durante dos horas la alarma por tsunami en varios países del Caribe, entre ellos Cuba, la República Dominicana y las Bahamas. El Centro de Advertencia de Tsunamis de EE UU en Hawai levantó la alerta de tsunami después de comprobar que el movimiento sísmico provocó una marejada de 12 centímetros sobre lo normal en Santo Domingo, República Dominicana, y de menos de un centímetro en las profundidades, sin que esto supusiera una amenaza para las zonas costeras.
El terremoto es el mayor que se registra en la isla que comparten Haití y República Dominicana desde 1946, cuando se produjo uno de magnitud 8,1, según un experto dominicano.
Tres réplicas
Poco después de la primera sacudida han tenido lugar tres réplicas, una de 5,9 en la escala Richter y otra de 5,5 y la última de 5,1. El Instituto Geológico de Estados Unidos (USGS) ha informado de que la primera réplica ocurrió 7 minutos después del terremoto. Esa réplica fue de 5,9 grados y tuvo su epicentro a 65 kilómetros al sudoeste de Puerto Príncipe y a 95 kilómetros al este de Les Cayes, dijo el USGS. Doce minutos más tarde, a las 22:12 GMT, los sismógrafos del USGS detectaron una segunda réplica de 5,5, con epicentro a 25 kilómetros al sudoeste de Puerto Príncipe y a 27 kilómetros al norte de Jacmel.
miércoles, 13 de enero de 2010
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1 comentario:
tremendo... no hay palabras para eso...llueve sobre mojado, si. el tema es si no hubiera estado mojado....
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