sábado, 2 de octubre de 2010

Limpieza de sangre


Mi amigo Koen Suidgeest (el fantasma del sur) me envía esta foto tomada a principios de septiembre en el metro de Madrid.

El Corte Inglés, en su tradicional "Vuelta al cole", ha elegido una muestra bien representativa de esta España plural en la que más del 12 por ciento de la población es extranjera (según cifras oficiales). Basta darse una vuelta por cualquier barrio de cualquier ciudad de la piel de toro, exceptuando, obviamente, las reservas de pijos y pijetes, para comprobar cómo son las cosas.

Pero hete aquí que El Corte Inglés -empresa señera de otros tiempos, faro de gente bien y naturalemente de derechas, faltaría más- considera que lo que realmente tenemos en España es un montón de niños rubios, con distintos grados de rubiedad. Ángeles rubios, con rubios rizos, dientes y ojos rubios como en Noruega o en Germania, esa tierra donde un enano moreno capitaneó hordas de rubios, vamos, como un calvo vendiendo crecepelos.

Los marroquíes, ecuatorianos, peruanos, negros de toda clase y condición al Corte Inglés no le interesan. Qué van a consumir esos tirados.

Bueno, El Solitario también fue a un colegio de pago y ya veis...

Pero qué queréis, coño, el extranjero está bien en los guethos, trabajando en las obras o limpiando casas. ¡Esclavos baratos, coño, para la raza superior! Pero enviar sus hijos a colegios con uniforme. ¿A nuestros colegios? ¿Mezclándose con nuestros hijos rubios? ¡Válgame Dios! ¡Hasta ahí podíamos llegar! ¡Santiago y cierra España!

A ver si es que Paquito tenía razón y lo dejó todo atado y bien atado.

1 comentario:

Irina dijo...

Después de lo que ha pasado en Francia -el país de la liberté, egalité et fraternité- con los gitanos rumanos... ¿qué podemos esperar de una tienda marcadamente elitista como El Corte Inglés? La verdad... la foto y el reclamo publicitario son una auténtica vergüenza.